En exclusiva con Mundo Cooperativo, Juan Miguel Martín, vicepresidente de Acofar y tesorero de Fecofar detalló la realidad del sector farmacéutico ante la emergencia sanitaria en el país por coronavirus.
Desde su lugar el movimiento cooperativo está dando respuestas a la problemática actual que afronta la sociedad argentina con la cuarentena obligatoria y emergencia sanitaria por la pandemia del Covid – 19, ya con casos y víctimas fatales confirmadas en el territorio nacional.
Ya sea en salud, abastecimiento, servicios, higiene o incluso de trabajo y confección de materiales útiles para afrontar el coronavirus, entidades de la economía solidaria siguen con su trabajo habitual y funcionando con las regulaciones estrictas para este tipo de casos, manteniendo la prevención.
Durante una entrevista en exclusiva con Mundo Cooperativo, Juan Miguel Martín vicepresidente de Acofar Cooperativa Farmacéutica y tesorero de la Federación de Cooperativa Farmacéutica (Fecofar) contó detalles de la actualidad del sector ante este contexto de emergencia sanitaria por el que atraviesa el país.
“Como farmacéutico me encuentro ejerciendo la responsabilidad que exige esta situación atípica como es vivir una pandemia por la difusión de coronavirus. Como ciudadano y vecino cumplo con las recomendaciones de las autoridades de aislamiento en mi casa cuando no estoy trabajando en la farmacia, con temor, sí, porque la amenaza de enfermedad está muy latente para todos, sin distingo alguno”, expresó el dirigente cooperativo.
“Lo altamente contagioso de persona a persona que es este virus por su presencia en las mucosas de nariz y boca y por esa razón presente en las microgotas que despedimos al hablar, toser y estornudar, o simplemente por mojar con saliva los dedos, cuestiona todas las tareas de todas las personas”.
¿En qué etapa se encuentra el servicio sanitario nacional y principalmente la industria farmacéutica para afrontar el coronavirus?
Al no existir ningún medicamento especifico contra el virus, la industria no ha sido puesta a prueba ante el enorme número de enfermos. Pero el deber de usar alcohol para desinfectar las superficies de todos los lugares, teléfonos y manos y que han sido receptáculo de las secreciones orales, ha hecho explotar la demanda de un producto que no es raro como el alcohol, pero que ha eliminado todas las existencias de stock de distribuidores y farmacias. También han desaparecido de distribuidores todo el material de protección, barbijos, guantes, camisolines, cofias que necesitan médicos y enfermeros por la gran demanda. Seguramente, luego de la gran demanda inicial, irá normalizándose la oferta simplemente por ser un producto de fácil elaboración en Argentina.
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¿Cómo es el plan de trabajo que están desarrollando. Norma, con más guardias especiales?
El movimiento da respuestas para el progreso de todas las personas en tiempos normales y también en tiempos difíciles como los que se nos aproximan, a toda la comunidad.
Solamente el trabajo solidario da un poder extra a cada persona para enfrentar situaciones de apremios de cualquier naturaleza, de salud, de capital, de instrucción y formación, de trabajo, etcétera, etcétera.
A principio del año las entidades farmacéuticas bonaerenses fueron afectadas por el impuesto que decretó el gobierno provincial. ¿Cómo quedó esa situación ante el contexto actual?