Para Vicentín: Una salida asociativa y cooperativa

Eduardo Fontenla.
Eduardo Fontenla.Lic. en Cooperativismo y Mutualismo y Lic. en Ciencia Política y Gobierno.
Las indefiniciones, los malabarismos y los procesos judiciales de la Empresa Vicentín, nos hace pensar en una fórmula empresaria superadora como son las “Cooperativas de Nueva Generación” (CNG). Porque la salida no es la quiebra.

Por Eduardo Fontenla*

Ya existe presencia y participación económica cooperativa en la “crisis”  de Vicentin y fue a mediados de enero pasado, a poco más de un mes de que la empresa Vicentin se declarara el 4 de diciembre en cesación de pagos, cuando la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA) decidió poner en marcha un salvataje para las cooperativas que tenían acreencias por la agroexportadora.

La ACA es la principal acreedora comercial de Vicentin, por u$s 90 millones. Destacando que la Asociación se hizo cargo de los compromisos que tenía Vicentín con sus cooperativas asociadas para recuperar esos fondos de operaciones certificadas.

Por ello, pensamos en las CNG, que toman por definición, como empresa núcleo y articuladora de los factores de la producción y de la gestión y control a las cooperativas y se basan en posicionamientos, transformaciones e innovaciones pensadas desde las necesidades y expectativas de los asociados y sus familias, asegurando que sean protagonistas y aumenten sus ingresos con distribuciones equitativas.

Como cooperativas núcleos y articuladoras podemos pensar en la ACA, en Agricultores Federados Argentinos Coop. Ltda. (AFA), Unión Agrícola de Avellaneda (UAA) y otras entidades de la economía social de significativa presencia operativa que deseen sumarse y concertar una salida asociativa con participación pública-privada, especialmente con el Banco de la Nación Argentina con una acreencia de U$S 300 millones e YPF Agro entre otras.

Dejamos claro las menciones de cooperativas con acreencias son a título de ejemplo y no son limitativas a ninguna entidad o sector tengan o no activos en Vicentin. Sólo es imprescindible compromiso con el país y gestión transparente y, hacer honor al lema “unidos para ser más fuertes”.

Una negociación conjunta clara y real

Es desafío es construir una moderna arquitecturas económica, tecnológica, colaborativa, y de expansión con diseños organizacionales de aportaciones de capital internas y extra-cooperativo nacionales que permiten sistemas y entramados de reproducción ampliada y que las coloca en condiciones semejantes o superiores a otros modelos empresariales capitalizados.

Aquí se plantea una cuestión de fondo como es asegurar la participación, gestión y control de capitales nacionales.

Obviamente, para el monto de la deuda de Vicentín la capitalización propia cooperativa no es suficiente para la inversión de salvataje que se requiere. Por lo tanto, se debe tender sumar más actores locales/regionales, cooperativas, mutuales, productores acreedores, sin acreencias y de los terceros que pueden estar dispuestos a invertir garantizando desde la CNG resultados seguros, sostenibles y transparentes.

Aquí tenemos una forma de apoyar la inversión nacional con especial énfasis en lo local-regional y para proteger el trabajo, la generación de trabajo genuino, digno, bien remunerado, con participación y compromiso de las entidades de los trabajadores.

Ojalá podamos pensar, buscar consensos y construir para un salida cooperativa y asociativa a través del modelo CNG que tiene muchas potenciales y también valores, principios caracteres propios de organización. Utilizando la metodología compatible del encuentro, es decir, trabajar a partir de lo que une al movimiento cooperativo y en alianza estratégica con el gobierno nacional, los estados provinciales y los municipales.

Dejamos claro que el diseño de las CNG en el mundo no fue pensado para recuperar empresas en concurso, quiebra o crisis, sino fue pensado y desarrollado para aumentar el agregado de valor en las cadenas agro-bio-industriales y la participación de productores agropecuarios de pequeñas y medianas dimensiones.

Pero nos parece un modelo de racionalidad empresaria para solucionar una crisis importante de producción y trabajo como la que generó para la Argentina Vicentín, que exportaba el 9% de los granos, oleaginosas y derivados.

Creemos que hoy le toca al cooperativismo hacer historia y aumentar su participación en la actividad y exportación agro-bio-industrial.