*Por Ramiro Martínez
Este 17 de mayo se celebra el Día Mundial del Reciclaje, una ocasión por demás propicia para repasar algunos desafíos pendientes y avances de nuestro país en el cuidado del medioambiente.
La media sanción para la Ley de Educación Ambiental Integral, lograda el pasado 27 de marzo en la Cámara de Diputados, sin duda es uno de los puntos a destacar. Ya que, esa norma, incorporará contenidos sobre esta temática a la enseñanza oficial y establece el derecho a instruirse al respecto. Ahora, solo resta que el Senado finalmente la apruebe, para su puesta en práctica.
También es valorable el rol que cumple la Ley Nacional 27.279, promulgada en 2016, que se refiere al tratamiento de envases vacíos de fitosanitarios, y que responsabiliza a las empresas fabricantes e importadoras de la recolección y el posterior tratamiento de los recipientes comercializados.
De hecho, el Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS) envió cartas documento a más de un centenar de firmas que incumplen con esa normativa. Tampoco hay que olvidar la entrada en vigencia, desde el 1 de marzo, de la resolución 317/20 del OPDS, que amplía a todos los municipios bonaerenses la obligatoriedad de que grandes generadores tengan un plan de gestión de residuos sólidos. Esto incluye a hoteles, galerías, hipermercados, cadenas de comida y universidades.
Pero todo este trabajo no es suficiente sin políticas públicas más fuertes que sean destinadas a mitigar el daño ambiental. De hecho, cada uno de los municipios genera diariamente unas 600 toneladas de basura, y el CEAMSE, que se ocupa de la gestión de los residuos sólidos del AMBA, recibe entre 16.000 y 17.000 toneladas por día.
Si se compara eso con las 300 que gestiona mensualmente la cooperativa de reciclado Creando Conciencia, uno de los referentes de la actividad, se verá que se necesita de un acompañamiento y esfuerzo mayor para poder gestionar los residuos sólidos.
Se deben generar incentivos para lograr que se multipliquen los jugadores del sector. Sin embargo, a pesar de la resolución 317/20 mencionada anteriormente, 90 de las 135 localidades provinciales no cuentan con “Destinos Sustentables”, que tienen como propósito el tratamiento físico de los residuos sólidos urbanos.
Para revertir este escenario, tiene que existir una sinergia entre Estado, Economía Popular y ámbito privado. Se deben generar nuevas unidades que permitan dar una respuesta más significativa a la necesidad de reciclar la basura y evitar con ello el daño ambiental, con leyes que se apliquen con mayor rigurosidad.
En ese sentido, la resolución 317/20, declarada de interés público por parte del Consejo Federal de Medio Ambiente (COFEMA), es un gran paso para que localidades de todo el país sigan los mismos pasos, favoreciendo la mejora del medioambiente y la inclusión social de recuperadores urbanos.
Te puede interesar:
(*) cofundador de Creando Conciencia y presidente de la Confederación Argentina de Trabajadores Cooperativos Asociados (Conarcoop)
Fuente: Clarín